Lealtad
"Te seguiré hasta el último suspiro con la verdad y la lealtad", dijo William Shakespeare.
¡Qué lindo es saber en quiénes podemos confiar porque son leales a nosotros y a sí mismos!
La LEALTAD es una virtud GRANDE y se siente increíble estar rodeados de personas leales.
Las personas leales son, por encima de todo, personas honestas.
Se rigen por un código que está siempre en sintonía con sus valores, pero también con ese compromiso respetuoso con el otro, ahí donde no caben las traiciones, las mentiras o las actitudes interesadas.
Este concepto tan interesante como profundo, va más allá, incluso, que la confianza.
Es conferir al otro un sentimiento de atención, respeto y compromiso continuo donde sabemos que no vamos a ser traicionados.
Donde entendemos que en esa conducta no hay intereses ocultos o dobles intenciones.
Como les dije, es una virtud GRANDE. GORDA.
Pero por qué no enseñar a los chicos, desde chiquitos, a ser leales.
¡Hagamos la prueba! No nos guardemos esta virtud solo para los adultos. Hablemos de esto y démosles el ejemplo.
¡Se puede!